Este domingo 10 de julio, se registraron dos tiroteos en bares en Sudáfrica, donde los atacantes parecen haber disparado al azar contra los clientes. El ataque dejó al menos 19 muertos en una barriada cerca de Johannesburgo y en una localidad en el este del país, según lo informó la policía.
“Llegaron y dispararon contra la gente que se estaba divirtiendo”, señaló Nonhlanhla Kubheka, comandante de la policía local. En total, 23 personas recibieron disparos y 12 fueron declaradas muertas en el lugar de los hechos. Las víctimas tenían entre 19 y 35 años.
Mientras tanto, en Pietermaritzburg, en la región zulú del este del país, varios hombres abrieron fuego indiscriminadamente en una taberna, matando a cuatro personas e hiriendo a otras ocho. Los dos tiroteos operaron de manera similar, lo que ha despertado el interés de los investigadores.
Los tiroteos son comunes en Sudáfrica, uno de los países más violentos del mundo. “No podemos permitir que los criminales nos aterroricen de esta manera”, dijo el presidente Cyril Ramaphosa en una carta publicada después del ataque.
“Estas muertes son inaceptables y preocupantes”, añadió. Luego, el mandatario ofreció sus condolencias a las familias de las víctimas.
Las autoridades todavía no han realizado ningún arresto; no obstante, ya abrieron una investigación para esclarecer el crimen.
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